Iglesia Misión Bautista Colonia Cuscatlán, Cojutepeque.

  El descontento y la desconfianza proceden de la incredulidad; un caminar inestable es la consecuencia. Debido a la finitud del ser humano anhela algo o a Alguien más alto que sí mismo. La palabra psiquiatría viene de 2 términos griegos: " psique " y " iaetreia ". La primera, trae la connotación de " persona, alma, aliento, mente, razón " en tanto que la segunda habla del " tratamiento, sanidad o restauración ". Nuestro Ministro o Pastor celestial, no solamente trata las mentes sino que llena la intimidad en el alma. Una correcta relación entre las leyes físicas, espirituales y mentales a través del mismísimo diseñador del ser humano: Dios. El restaura mi alma; Me guía por senderos de justicia Por amor de Su nombre. Salmos 23:3 El salmista ya había tomado una decisión, buscó ayuda profesional. Podríamos economizarnos unos centavos invirtiendo menos de $20 acercándonos a Dios, no en una oración estricta, sino en intimidad de amor y sinceridad. 

  Sin ningún interés de tratar duramente con la comunidad de los corintios, el autor de la carta les ruega que prueben su fe en Jesucristo, para ver si Él vive en ellos.  Por consiguiente, ruega a Dios por la gente de Corinto, así como por aquellos que constituimos la iglesia hoy, para que seamos restaurados y alcancemos la madurez. " Examinaos vosotros mismos para ver si estáis viviendo la fe; probaos vosotros mismos. ¿O no sabéis que Jesucristo está en vosotros? A menos que quizás hayáis fallado la prueba".  2 Corintios 13:5 Queremos enfatizar la importancia constante del autoexamen de la vida espiritual y la conducta diaria ; dos aspectos que muchos de nosotros separamos creyendo en la teología pero menospreciando la producción de frutos en su tiempo. Habla Cristo por usted? O solamente somos simples futuros espectadores de un terrible escenario donde los principales protagonistas seremos nosotros? No solo basta con " decir " ser cristianos. Querer alcanzar pu

  Muchas veces cuando pensamos en nuestro enemigo pensamos en alguien más, quizá pensamos en el ángel caído, quizá pensamos en personas que nos llevan la contraria pero muy pocos reconocen a su verdadero peor enemigo, “Yo mismo”, mi peor enemigo soy yo mismo. Cuando no nos damos cuenta de estas cosas solemos buscar culpables, como lo hicieron Adán y Eva: “La mujer que me diste”, “La serpiente me engañó” Pero realmente nosotros somos los culpables: Mateo 15:18-20 Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre. Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias. Estas cosas son las que contaminan al hombre; pero el comer con las manos sin lavar no contamina al hombre.  No es lo que nos dicen lo que nos frustra, es la forma en la que recibimos y aceptamos lo que otros dicen, no es que alguien me engaña para cometer un error es por decisión propia que decido hacerl